Capitulo 21.
Agua y aceite.
Mariana se despertó en los brazos de Pedro. La noche anterior habían llegado tarde a su cabaña y se habían acostado sin cambiarse, por lo tanto seguía con el vestido de anoche.
Como un flash recordó el mágica momento que había vivido la noche anterior, y cayo en la realidad. Era su primer novio y había roto a sus propias reglas impuestas por ella, había seguido a sus sentimientos y no a su razón y se había que eso le traería pésimas consecuencias.
Pedro se levanto para interrumpir sus pensamientos y le beso en la boca, y en ese momento se dio cuenta que se jugaría a pesar de todo lo que pueda pasar.
Siguió el dulce beso y después se fueron a bañarse y cambiarse para disfrutar el domingo en el complejo.
Mariana se puso una bikini azul y arriba una remera mangas largas blancas y una pollera tiro alto de jean con unas sandalias gladiadoras. Pedro se puso su malla y una remera azul con hojotas. Se fueron directo a la pileta climatizada y se pidieron unos sándwiches con jugo para desayunar.
- Te juego una carrera.- reto Mariana a Pedro.
- Dale.- aceptó y se fueron a una esquina para comenzar.
Mariana salio antes y tenia la delantera pero Pedro la agarro del pie y la arrastro hacia él. La abrazo desde la cintura y la sumergió para darle un beso en la boca. Mariana trataba de soltarse pero Pedro era más fuerte y para que pueda respirar la sacaba cada tanto y la volvía a sumergir antes de que ella pueda protestar.
Después de un rato Mariana lo empujo fuerte y consiguió soltarse,
- Violador.- le grito enojada y Pedro reía.- Imbécil, casi me ahogo.- agregó y salio de la pileta.
- Dale no te enojes.- dijo Pedro y salió de la pileta para agarrarla. Mariana se echo a correr pero Pedro la alcanzo y la abrazo desde atrás por la cintura.- Dale Lali no te enojes, estaba jodiendo nada más, siempre fue mi sueño besar a la chica que quiero debajo del agua.- dijo dándole reiterados besos en el cachete.
- Es que me desespere.- se quejo Lali aflojando.- Esta bien tontito, ya me desenoje.- dijo Mariana le dio un corto beso en los labios.
Estuvieron toda la tarde jugando en el agua, parecían dos criaturas. Si algo era que tenían en común era saber divertirse. Pero en lo demás eran como el agua y el aceite. Pedro era cariñoso, todo el día la besaba y la abrazaba, Mariana era mas arisca, Mariana era racional, Pedro era más apasionado. Pero a pesar de cualquier diferencias, se notaban el amor que se tenían y eso era mas fuerte que cualquier diferencia.
Después decidieron ir a bañarse y alquilar una película.
Mariana estaba recostada en su cama y había llamado a la recepción para que les traigan una película. Pedro seguía bañándose.
Tocaron la puerta y Mariana fue a atender. Era un empleado que venía a traerle la película y unos lomitos que se habían pedido.
- ¿Cuánto es?- preguntó Mariana al recibir el pedido.
- Doce.- contesto el empleado con una sonrisa.- La propina se pude pagar de otra forma.- agrego con una actitud canchera.
- ¿Y cual es la otra forma?- preguntó seductoramente.
- Una cita.- respondió el empleado con una sonrisa.
- Una piña te voy a dar a vos.- dijo una voz masculina. Lali y el empleado giraron a ver a Pedro que tenía la toalla puesta desde la cadera.
- Disculpa pibe, no sabía que estaba arreglada si no nunca le habría tirado onda, igual ella me siguió.- declaró el empleado quien le quito rápidamente la plata de la mano a Mariana y cerro la puerta.
Pedro como si nada se saco la toalla porque tenía el calzoncillo a bajo y se puso la remera. Mariana se quedo viéndolo neutral para esperar su reacción. Cuando termino de cambiarse Pedro se giro y le dirigió una mirada fría.
- ni un día cumplimos y vos ya le seguís el juego a alguien.- le reto Peter.
- Discúlpame es que estoy acostumbrada a eso.- se defendió Lali y lo beso en la boca. Pedro le siguió el beso y como si nada se olvidaron de todo.
- Te perdono pero no vuelvas a hacerlo porque ahora sos mía.-dijo Pedro besándola.- Te dije que lo ibas a hacer.- agregó con una sonrisa al costado.
- Pero te olvidas de algo importante.- Pedro la miro confundido.- Eso significa que también sos mío.- agregó y lo beso apasionadamente.
Capitulo 22.
Obstáculos.
Tres días más pasaron en las Cabañas Sol, y cuando volvieron al Campamento ya era jueves 14 de enero.
Cuando volvió las esperaban sus dos mejores amigas en la parada del colectivo, junto con sus novios. Si porque Candela se había arreglado con Agustín.
Volvieron en combi al Campamento y Mariana les había contado a sus amigas que se había arreglado. Las dos se pusieron muy contentas y planearon una cita triple entre las parejas,
Mariana quiso dormir durante el resto del día y Pedro también. El viaje era muy agotador. El hermano de Mariana, Tacho, paso a la pieza para decirle algo a Lali. Pero se llevo una sorpresa.
Se habían acostado en la misma cama, Pedro abrazaba a Mariana desde la cintura y Mariana tenía una pierna arriba de Pedro. Habían terminado así inconcientemente.
- ¡Pervertido, solta a mi hermana!- gritó Tacho abalanzándose sobre Pedro.
Mariana se despertó por el grito y pudo ver como Tacho se tiraba arriba de Peter y le pegaba piñas.
- ¡Solta Juan, déjalo en paz!- gritó Mariana con su voz potente. Pedro quería sacar a Juan de arriba pero era mucho mas grande que el y mas pesado.
- ¡Basta!- entro Eugenia en la habitación, se había imaginado lo que ocurría.
- ¡Basta!- imitó Lali y mordió a Juan en la cola para que lo suelte.
Tacho gritó y cayó en el suelo porque Pedro aprovecho la ocasión y lo empujo con las piernas. Mariana abrazó a Peter y le dio un corto beso en los labios y prosiguió limpiando la sangre que había producido por los golpes con una remera que encontró tirada.
- No me gusta que reacciones así Tacho, yo no quiero estar con un tipo violento.- se enojo Eugenia y salió de la habitación.
- ¡ves lo que causas!- dijo Juan levantándose del suelo y vio la tierna escena entre Peter y Lali.- Primero te aprovechas de mi hermana y ahora me haces pelear con mi novia.- agregó y frunció el seño.
- ¡Tómatelas Tacho! El es mi novio y si hay alguien que…-
- ¿Tu novio? Yo te mato.- interrumpió Tacho y se aproximó para volverle a pegar pero Mariana se puso en el medio antes de que pueda tocarlo.
- Si, yo soy grande para tenerlo, y yo fui quien me acosté en su cama e hizo que termináramos en la posición que viste.- mintió Mariana y sonrió irónicamente.- Después de todo, no sos mi papá para que me estés cuidado y ahora anda a arreglar las cosas con Eugenia antes de que se vaya con otro.- ordenó y Tacho asintió y salió por la puerta.
- Mira como tenes la cara, ¿te duele?- preguntó Mariana acostando la cabeza de Peter entre sus piernas y acercando su cara. Acto seguido, empezó a soplar las heridas.
- Ahora no.- contesto Peter sonriendo de costado al tener a Lali con su rostro tan cerca.
- Yo te voy a curar tus heridas.- dijo Mariana y empezó a besar la cara de Pedro. Beso su nariz, su boca, los cachetes y la frente.- ¿Estas mejor?- preguntó dándole reiterados besos en la mejilla.
- Me voy a lastimar mas de seguido para que seas así de cariñosa.- dijo Pedro cerrando los ojos para disfrutar mas las caricias.
- ¿Qué decís? Si soy re cariñosa.- corrigió Mariana y le empezó a acariciar el pelo.
- Sabes que es mentira, soy yo quien te besa y te abraza todo el tiempo.- corrigió Pedro y se levanto.- Pero eso es porque me tenes miedo.- agregó y agarro la cara de Mariana y la beso apasionadamente. Mariana le siguió al principio pero cuando Pedro quiso profundizar el beso ella lo empujo para que la soltara.- Ves sos arisca.- mostró Pedro y le beso en la nariz.
- Algo, pero eso es porque sos mi primer novio.- dijo Mariana y le devolvió el beso en el mismo sitio.
- Puede ser, pero también es porque no estas acostumbrada a que sean cariñosos con vos, sos fría.- dijo Pedro y la abrazo fuertemente.- Pero yo te voy a enseñar lo que es el amor.- agregó y la volvió a besar en la boca. Mariana siguió el beso lentamente, Pedro siguió el ritmo de Lali un tiempo y luego empezó a besarla más apasionadamente de vuelta. Mariana seguía el beso como podía, cuando Pedro con su lengua pidió permiso para profundizar el beso, Mariana se le concedió y Peter entro a degustar toda la boca de Mariana. Lali no estaba a tan acostumbrada a aquellos tipos de besos pero con Peter se relajo y sintió por primera vez en su vida verdadero amor.
- Te amo.- dijo Pedro al separarse para poder respirar. Esta vez fue Mariana quien lo beso y profundizo el beso.
Eugenia se encontraba llorando en su pieza que compartía con Tacho. Estaba acostada sobre su cama y abrazaba fuertemente a un peluche que le había regalado su actual novio cuando había cumplido un mes de conocerse.
Después de llorar un rato más, se levantó y con su manga se limpió las lágrimas que seguían cayendo. No se habían peleado pero veía que su relación con Tacho, que no tenía ni siquiera un mes, se venía estropeando. No era cosa de ella, sino que veía en Juan cosas que no le gustaban y últimamente lo venía sintiendo más lejos.
<< ¿Y que se puede esperar de los hombres?>>, pensó para si misma, mientras miraba el suelo y veía como cada lágrima terminaba ahí.
Le dolía porque todas sus relaciones terminaban igual y siempre que creía encontrar al hombre de su vida la desilusión la acataba, y más le dolía que con Tacho sea tan rápido porque había sido el hombre que más quiso en tan poco tiempo.
- Bonita ¿Puedo pasar?- preguntó Tacho. Eugenia no se animo a levantar la cabeza y asintió.- ¿Por qué lloras linda?- preguntó y se sentó al lado de su novia y la abrazo desde la cintura. Eugenia sollozo en sus brazos y Tacho sabía que lloraba por su culpa.
- Siempre es lo mismo tacho.- contestó Eugenia con un hilo de voz.- Primero creo encontrar al amor de mi vida, y después me desilusionan, y me duele que pase esto con vos porque yo te amo.- dijo y se apegó más a su novio.
- ¿Qué es lo que te molesta de mi?- interrogó Tacho y la levanto el mentón para mirarla a los ojos.
- Hace días te veo distante y sos siempre agresivo, impulsivo, nunca te detenes a pensar las cosas, y a veces con eso me lastimas.- contestó Eugenia tratando de mantener la mirada puesta en él.
- Diste en el clavo, son las cosas que mas me critica la gente.- confesó Tacho y le acaricio la mejilla.- Nunca me importa pero por vos voy a tratar de cambiar.- agregó y la beso en la frente.- Por mi bonita hago cualquier cosa.- dijo y la beso en la nariz.- Dame tiempo.- dijo por último y ataco su boca.
<< Pero el es distinto porque arregla de todo con ternura>>, pensó Eugenia y contesto el beso.
Agarrados de la mano caminaban por el parque del Campamento, se sonreían con cada miraba y en eso reflejaban el amor que sentían. En tan poco tiempo creían estar enamorados. En tan poco tiempo se conocieron, histeriquearon, tuvieron un tercero, se confesaron lo que sentía, se desasieron del tercero, anduvieron y se arreglaron. Todo un ciclo en un mes y medio, pero estaban hechos tal para cual.
Pedro abrazo a Mariana por la cintura y ella lo abrazo apoyando su mano en su hombro. Ya hace una semana estaban juntos y las cosas iban de maravilla. Esos siente días fueron los mejores de su vida para ambos.
- ¿Qué queres hacer?- preguntó Mariana sentándose arriba de las piernas de su novio.
- Esto.- contestó Peter y la beso en la boca.
De vuelta se sumergieron a esa adicción que venía siendo rutinaria hace una semana, pero esta vez Pedro acaricio la espalda de Mariana subiendo y bajando su mano. Lali enredo sus manos en el pelo de él y lo acariciaba. Siempre el que se animaba a pasar un escalón mas era Peter, Mariana era más tímida, pero eso también lo había enamorado a él. Esa mezcla de timidez y de desvergüenza. Extrovertida para hablar y relacionarse y tímida para expresar sus sentimientos y experiencias, la hacían misteriosa y a pesar de conocerla en tan poco tiempo, la conocía mucho y la amaba.
- ¿Interrumpo?- preguntó una voz que hizo que se alejaron. Mariana se dio vuelta y vio la cara enojada de Gastón.
- ¿Qué pasa?- preguntó tímidamente Lali.
- Quiero hablar con vos.- contestó Gastón. Mariana asintió y Pedro no se movió del lugar.- Solos.- remarcó y Pedro negó con la cabeza.
- Es mi novia.- dijo Pedro. Mariana le pego en la panza.
- Por favor.- pidió levantando las cejas y abriendo los ojos grandes Lali. Pedro no pudo resistirse y asintió.- Tienen cinco minutos, voy a comprar una gaseosa.- dijo y se fue hacia el comedor.
Gastón se sentó al lado suyo y sin previo aviso la agarró de la nuca y le empezó a besar la boca. Mariana abrió los ojos sorprendida, y trataba de soltarse y por suerte alguien vio la escena antes que Peter y vino al rescate. Lo empujo y tras de pegarle piñas, Gastón se fue y se fue a abrazar a Mariana.
- Gracias Simón.- agradeció y contesto al abrazo.
- Suficiente es mi novia.- interrumpió Peter y los separo. Simón rió y se fue.
- Toda tuya.- dijo Mariana y lo beso.
miércoles, 7 de octubre de 2009
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