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sábado, 19 de septiembre de 2009

Capitulo 17

Capitulo 17.

Poniéndole fin.

1 de Dic. 12 hrs.- Cabaña Nº5

La fuerte luz que llegaba por la ventana levanto a Pedro, no podía seguir durmiendo. Fregó sus ojos y se estiro. Sintió algo que estaba al lado suyo, y toco una mano caliente. Abrió los ojos bruscamente y vio a su alrededor para confirmar lo que suponía. Se había quedado dormido al lado de Mariana. Sonrió de costado y se reincorporo. Ese nuevo año tenia ganas de compartirlo junto a ella.

La sensación de que mas amor y alegría no podía caber en su corazón era nuevo para el, ni bien al principio se había asustado, hoy lo disfrutaba y quería vivir con ella para siempre. Dirigió su vista a la culpable de todo lo que sentía y la vio dormida. Arrugando su nariz y cerrando sus ojos fuertemente. Beso la punta de su nariz, y la sacudía levemente.

- Buen día princesa.- saludo cuando ella abrió los ojos y recibió una calida sonrisa.

- Buen día.- respondió Lali y se reincorporo en un empujón.

- Seguro soñaste conmigo.- dijo el y ella asintió.- Entonces soñaste bien.- sonrió de lado y Mariana lo miro un rato. A veces no podía creer su sonrisa tan perfecta.

Pedro se acerco a ella y le dio un corto beso. Mariana lo empujo y le hizo gesto que parase, el motivo no faltaba recordar. Saltó en la cama y cayo al suelo. Agarro su ropa que tenia en la punta de la cama, y tirándole un beso volador, se fue de la pieza dejando a Pedro con la misma sonrisa con que la había despertado.

Comedor- 12.30 hrs.

Pedro y Mariana llegaron justo a la hora de la comida. No estaban tan presentables ya que no tuvieron mucho tiempo y las reglas eran estrictas.

Se fueron hacer cola para elegir lo que quería para almorzar y luego pagaron.

Las miradas de sus amigos sobre ellos no faltaban. Gastón, para su suerte, esa mañana había viajado a Río Gallegos y tenían todo el día para disfrutar sin tener que estar escondiéndose.

Hicieron gestos a sus amigos que se bien a comer a fuera y partieron juntos. Tacho los miro en forma amenazadora. Para el Peter no era de buen palo.

Se sentaron bajo la sombra de un árbol bastante apartado. Pedro se sentó en forma de indio y Mariana arriba suyo. Se quedaron un largo ratos abrazados, una mirada era más que mil palabras, y ellos lo vivían intensivamente.

Pedro quiso más que apréciala y llevo su mano a su mejilla para acariciarla. Mariana cerró sus ojos para disfrutar esa caricia.

- No sabes lo que desearía besarte.- confesó Peter pasando su pulgar por el labio de ella.- Habla cuanto antes con Gastón, cada minuto se me hace mas insoportable sin poder besarte.- agregó y beso sus mejillas.

- Le mande un mensaje para reunirme con el esta tarde.- contó con una sonrisa. Se acerco al oído de el y continuo hablando.- Esta noche ya voy a ser tuya.- dijo seductoramente. Pedro sonrió y se estremeció por sentir el aliento de ella en su oreja. Esos sentimientos eran nuevos para el y cada día le gustaban más.

- Eso me parece estupendo.- opinó y beso sus parpados cerrados.- Nos vemos esta noche porque me voy a una excursión solo de hombre.- contó y tras robarle un pico se paro y se fue.

6hrs.- campamento Mandalay.

Quiero hablar con vos Gas- Mar.

Maria volvió a leer el mensaje que había mandando a Gastón, era tan seco que se arrepintió en el instante que lo leyó, pero no quería darle falsas ilusiones de lo que se trataba. Miro la hora de su reloj una vez más, eran casi las siente y hace media hora lo venía esperando. Cuando levanto la cabeza, lo vio a lo lejos, con esos hermosos ojos color celeste que parecían brillar y una amplia sonrisa en la cara. Esas dos característica habían sido razones de porque ella suspiro por el tanto tiempo, y hoy que encontraba el amor real, se dio cuenta que solo era nada mas que obsesión. La vida le enseñaba una importante lección.

- Hola Lali.- saludó Gastón y se sentó al lado de Mariana.- ¿Cómo estas?- beso los labios de ella.

- Bien, gas ¿Cómo te fue en Rió?- pregunto para distraer un poco la tensa situación.

- Bien, que se yo, me fui a hacer un tramite y volví, sin mucho que contar.- sonrió.- Tu mensaje me sorprendió y creo que me imagino de lo que queres hablar…

- Si Gas yo…

- Déjame hablar a mi.- Mariana asintió.- Se que te parece raro que de la nada te empiece a tirar onda es que…

- No de eso no te quería hablar, yo te quería hablar sobre vos y yo, pero…

- Te amo.- dijeron dos voces juntas. Mariana miro a su alrededor a Gastón sentado al lado suyo y Pedro parado enfrente de ella, ambos mirándola intensamente, pero con significados distintos en sus ojos.

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