Capituló 11.
Navidad dulce Navidad.
Navidad Boliche en Bariloche.
Los que querían después de celebrar Navidad en el campamento, a las una les pasaría a buscar un autobús para ir a Bariloche a un boliche de la zona.
Muchos chicos decidieron ir, entre ellos el grupo de Mariana y Pedro.
Pedro cuando había entrado al autobús, se había quedado impresionado al ver a Mariana. Se había cambiado el uniforme del campamento por ropa normal y se había pintado solo en una hora. Estaba hermosa.
Ahora en el boliche el estaba en la barra con una baso de Gancia en la mano y mirando directo a la pista de baile. Miraba a Mariana bailar con sus amigas, miraba a Mariana mover las coderas, miraba el pelo de Mariana agitarse, miraba la boca de Mariana cantar la canción que sonaba, la miraba con su sonrisa y haciendo movimientos sexy.
“Que linda que esta” pensaba él. “No que hdp, mira como se mueve”, “Es hermosa, “Como le doy”, “¿Qué es lo que esta haciendo sobre mi esta chica?”, “¿La saco a bailar, o no?”, “No se… mis amigos fueron a encarar, ¿Por qué no?” pensó por ultimo Pedro y sus pies lo guiaron enfrente de ella. Pedro le toco el hombro y ella se giro a ver quien era. Sonrió al darse cuenta y paro de bailar y se acerco más a él. “Ella es un sueño, que te tuvo despierto, un recuerdo leve de esto que siento” le cantó al oído y Pedro se estremeció. “¿Bailas?” preguntó, ella asintió y el la agarro fuerte por la cintura, ella levanto sus brazos y movía sus caderas y Pedro la pegaba mas a el. “salió a la disco bailar una diva virtual” le canto Pedro y ella le sonrió y contesto “Chequea como se menea” dijo y Pedro la soltó y ella se movía de una manera que logro impresionarlo. Mariana se acerco de vuelta a sus amigas y le tiro un beso volador y el le guiño un ojo, pero sin embargo, no se movió de la pista solo para tener mejor vista del espectáculo de Mariana bailando.
La veía divertirse, sonreír, cantar, bailar y el sentía alegría extrema en su corazón. No podía despegar su vista de la silueta de Mariana y ahí como un balde se dio cuenta de que no podía ni quería ser su amigo.
Navidad 4.00 a.m.- Bariloche- Boliche.
Pedro seguía en el mismo lugar sentado hace treinta minutos, Pedro seguía tomando del mismo vaso hace treinta minutos, Pedro seguía mirando hacia la misma dirección hace treinta minutos, Pedro seguía teniendo la misma cara de tonto hace treinta minutos.
Tenía ganas de bailar de vuelta con ella pero la imagen que tenía de ella bailando con sus amigas no quería arruinarla. Tendría muchas mas oportunidades de bailar con ella y quien sabe, si de otras cosas más.
La canción “Dont stop the music” paro de sonar y la escena se arruino. Mariana se aparto de sus amigas y se dirigía a la barra hacia… el. Pedro se puso tenso al instante y una pregunta cruza su mente ¿Desde cuando el se pone nervioso por una chica? Pero antes de que pueda contestarse esa pregunta, ella ya estaba adelante suyo.
- Te veo solito ¿Qué te pasa?- pregunta ella sentándose en la silla de al lado.
- Nada.- responde un poco irritado. Le molestaba sentirse nervioso por una chica.
- Bueno cuando tengas ganas de hablar búscame.- contestó furiosa ante la respuesta del chico.
Pedro la dejo ir sin decir nada y suspiró al darse cuenta que tenía que alejarse de ella si no terminaría enamorado. Y según lo que le enseño su vida es amor= dolor.
Boliche Bariloche 4.15 hrs.
-¿Bailas hermosa?- escucho una voz atrás suyo, y se dio vuelta para ver quien era. Aunque lo tenía bien claro.
Su bonito, como lo había declarado, estaba atrás suyo.
- Ni tenes que preguntar.- dijo ella.
Juan la agarro de la cintura y la acerco hacia el. Con la yema de su dedo recorrió su espalda de arriba abajo.
- La cosa es bailar no hacer sexo oral.-bromeó Eugenia en su oído. Y el sonrió.
Esa chica lo cambiaba lentamente, el volvía a tener vida, a hacer un adolescente, volvía a hacer él. No ese Juan que de tanto sufrimiento decidió ser frió y meterse en los negocios y responsabilidades, sino Tacho.
- Entonces bailemos.-dijo él y agarra las manos de Eugenia y las posiciono en sus hombros.
Bailaron la canción sin poder despegar la vista del otro. Eugenia sacudía su cabello, movía sus caderas, hasta que el no aguanto mas y la agarro de la nuca y pego su boca con la de ella.
Boliche 5 hrs.
Pedro no pudo parar de pensar en ella, y a causa del alcohol decidió ir a buscarla y decirle lo que estaba sintiendo últimamente.
Caminaba por todo el boliche, a penas reconocía a sus compañeros del campamento por la oscuridad que había. Se metió en medio de la pista, no estaba ahí, fue a la salida del baño de mujeres, no la encontró, fue de vuelta a la barra, tampoco estaba ahí. Se metió al baño de hombros para seguir ir al baño y después de seguir con su búsqueda y se metió en un closet, mientras hacia sus necesidades, escuchaba al lado besos y ruidos. Como buen ebrio hacia lo que pensaba y por curiosidad, cuando termino, se subió a la tapa del inodoro para ver quienes eran los desubicados del al lado. Y ahí la vio. Ella, mariana, besándose con un chico rubio.
Capitulo 12.
Celos.
Boliche 4.15 hrs.
Mariana se acerco a la barra y se pidió un vodka, hace mucho que no tomaba y tenia ganas de divertirse. Estaba por tomar un trago, pero alguien le saco el vaso.
- Ey.- se quejo Lali y miro al metido. Levanto la visto y ahí estaba Gastón con una sonrisa radiante y un jean y una remera celeste.- ¿Gastón? ¿Qué haces acá?-preguntó Mariana pestañeando sorprendida.
- El destino nos reunió linda.- contestó el con una sonrisa y posando sus manos en la cintura de ella.
- ¿desde cuando me chamulleas vos?- preguntó ella confusa. El fin de semana pasado el se había comportado muy raro con ella y ahora parecía tirarle onda.
- Desde que tenes dieciséis años y no sos tan pendeja.- respondió y la acerco mas a él.
- Gastón te recuerdo que soy ocho años menor que vos.- le recordó Mariana.
- Eso ya no importa, hace años me gustas.- confesó Gastón pegándola a su cuerpo.
- Pero vos amas a tu ex.- excusó Mariana.
- Eso creía.-corrigió y la agarro de la mano y la llevo hasta el baño de chicos.
- No puedo entrar acá.- dijo Mariana viendo las intensiones del hermano mayor de su amiga.
- Pero yo si.- le dijo y la beso en la boca. Y para Lali fue tarde, por años le había gustado Gastón. Siempre había rechazado a chicos a comprometerse no solo porque no se quedaba en el mismo lugar mas de seis meses sino que también su corazón le había pertenecido a él.
Boliche 5hrs.
Mariana seguía besándose, Gastón a pesar de estar un poco tomado estaba lo bastante sorbió para pensar lo que hacía y recordar. Y como era la primera vez que se besaba con Lali y que era mucho menor que ella solo jugaban con sus bocas.
Pero no sabían que alguien los miraba desde arriba. No sabían y ni se imaginaban. Ellos estaban en otro mundo.
Pedro se quedo choqueado, y sintió una opresión en el pecho, tenia ganas de llorar pero una pregunta surgió de sus entrañas ¿Desde cuando el, Juan Pedro _anzan, lloraba por una chica? Y bajo del inodoro, cerro la puerta y se fue del baño.
25 de Dic. 15 hrs.
Mariana se levanto de su cama a esa hora. Habían vuelto muy tarde del boliche y aprovecho para dormir todo lo que quería.
Miro a todo el cuarto y vio las sabanas y el acolchado de Pedro tirado en la cama y al dueño acostado hecho un bollo, se rió y se quiso tirar arriba suyo para despertarlo pero recordó como había actuado la noche anterior. Y pensando en la noche anterior recordó todo lo vivido con Gastón, sonrió y agarró su ropa para ir al baño a cambiarse.
Cuando termino bajo al comedor y ahí estaba Pedro tomando una chocolateada. No se había cambiado y estaba en bóxer, se tenso cuado lo vio.
Agarró su taza y se sirvió yogur y se sentó al otro lado de la mesa.
- Buen día ¿no?- dijo Peter con una sonrisa.
- Buen día Peter, pensé que no querías hablar, ayer estuviste re seco.- contó Mariana y tomo un sorbo de su yogur.
- Disculpa, estaba en otra nomás.- pidió perdón Peter.- Ayer… ayer tome un poco demás y me fui al baño y mientras hacia lo mió escuche ruidos en el closet de al lado y me pare por curioso y tomado, y…
- ¿No me digas que me viste con Gastón?-preguntó Mariana sorprendida.- Hay que vergüenza.- agregó poniendo sus mejillas rojas. Pedro asintió.
- No te preocupes no le voy a decir a nadie, pero ¿Quién es Gastón?-
- El hermano mayor de Euge.- contestó Lali muriéndose de vergüenza.
- ¿Cuántos años te lleva?- preguntó con el semblante serio.
- Ocho años.- contestó nerviosa.
- Es mucho mayor que vos, ¿Quién lo diría de vos Lalita? La chica histérica pero con sus puntos.- dijo en forma irónica Pedro.
- Lo conozco hace mucho.- trato de defenderse Lali.
- No es excusa.- retrucó Pedro.
- ¿Y a vos que tanto te importa?- interrogo Mariana mirándolo fijamente.
- Tenes razón.- dijo Pedro y se levanto de la mesa enojado.
- Para Pedro ¿Qué te pasa?- pregunto Mariana levantándose de la mesa y poniéndose enfrente suyo.
- Solo que soy tu amigo, y me preocupas y vos me venís con esos planteos.- respondió.
- Ah es eso.- Mariana se tiro arriba de el y lo abrazo.- Sos el mejor Pitu.- dijo ella y lo beso en la mejilla. Pedro se olvido de todo.
Comedor 12 hrs.
Todos los grupos estaban sentados en una ronda larga. Cielo hablaba de los preparativos que se harían para año nuevo y muchos estaban emocionados.
Se disculpo porque no presento a los chicos nuevos que habían venido mas tarde porque estaban rindiendo y Candela, entre ellos, se paro y se fue al centro. Dijo su nombre y contó un poco de ella y volvió donde sus amigas.
Después de todo el espectáculo, presentó a los nuevos coordinadores.
- Y ahora al nuevo coordinador, que fue un alumno desde que nació más o menos y ahora viene como trabajo de verano acá, les presento al coordinador Gastón Suárez.- presentó Cielo y apareció por la puerta de entrada el hermano mayor de Eugenia. Todos aplaudían entusiasmado, especialmente las chicas que lo veían muy lindo, los varones solo por cortesía. A Mariana se le iluminaron los ojos y aplaudió efusiva y Pedro la miraba de reojo con recelo.
Gastón paso por toda la habitación como un modelo, se paro enfrente, se giro y poso su vista en Mariana mientras se presentaba, cuando termino le guiño un ojo y se fue a sentar al lado de ella.
“Todo un verano juntos” le dijo disimuladamente al oído y Mariana no pudo mas que sonreír. Pedro los miró de reojo mientras ellos coqueteaban y el no pudo mas y se levanto de su lugar y se fue.
sábado, 22 de agosto de 2009
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